El repte de la comunicació-4: Una reflexió sobre les etiquetes del vi
En estos últimos años hay una tendencia a generar etiquetas supuestamente atractivas basadas en conceptos chocantes ("De puta madre", "El Perro Verde",..)
o con imágenes naif ("L'equilibrista", "El microscopi",...)
Mi concepto del vino y de los alimentos pasa por la permanencia en el mercado y ello exige la adecuación entre la imagen y la realidad de la empresa y del producto.
Como en todas las actividades hay tendencias (e imitaciones). Al surgir el primero que innovaba en el sentido de la imagen fresca y desinhibida -y tener éxito- se apuntan empresas que no lo son como empresa, creando confusión en el comprador y anulando la potencia de esta renovación en las imágenes.
Es interesante el comentario acerca de la "locura actual de tratar de ganarte al público por la etiqueta, sin que le importe lo que contenga la botella." que emite Joan C. Martín, autor de 'Los Supervinos 2016; la guía de vinos del supermercado'. (Ver http://spainwinesnews-noticiasdevinoespanol.blogspot.com.es/2015/11/el-vino-implica-un-amor-por-lo-local.html )
Una reflexión interesante al respecto puede verse en Pretty Wines (link alternativo) donde aparece el cava "Turó d’en Mota" de Cava Recaredo., con un diseño minimalista que sus creadores, estudio Pati Nuñez Associats, explican con las siguientes palabras:
«Así, en la etiqueta principal sólo aparece el logotipo y además sin ningún tipo de tinta: la tipografía está troquelada y grabada en láser sobre papel de algodón en color crudo.No hemos añadido ornamentos ni ninguno de los símbolos usuales del lujo -oros, platas, cintas, relieves, filetajes, etc. Hemos preferido el lenguaje de la sobriedad, porque creemos en la seducción de las cosas que no intentan seducir, y porque creemos que los mejores productos no necesitan ostentar.»
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